Campesinos de distintas regiones de Guanajuato liberaron las carreteras tras varias horas de bloqueo, pero reiteraron su rechazo total a la reforma de la Ley de Aguas Nacionales y advirtieron que continuarán las movilizaciones si no hay respuesta del Gobierno Federa
Los campesinos de Guanajuato levantaron el bloqueo carretero de más de seis horas en las principales arterías del estado, pero su lucha no ha terminado, sólo se reorganizan para frenar la aprobación de la Ley de Aguas Nacionales, que pone en riesgo el patrimonio de sus familias y centraliza el agua en las manos del gobierno.
“Hasta que la presidenta Claudia Sheinbaum diga que se retira la propuesta de la Ley de Aguas Nacionales, nos vamos a empezar a calmar”, adelantaron los productores.
La lucha campesina se encuentra contrarreloj ante la iniciativa de la presidenta Claudia Sheinbaum de reformar la Ley de Aguas Nacionales en donde, entre otras cosas, busca regular la concesión de aguas nacionales y sea la Comisión Nacional del Agua (Conagua) la encargada de la administración, distribución y manejo de los derechos del agua.
Aunque los productores campesinos han participado en audiencias abiertas y expuestos sus puntos de vista ante los legisladores del Congreso de la Unión parece que su voz no ha sido escuchada, puesto que no se han presentado modificaciones con base en las propuestas que campesinos de todo el país pusieron sobre la mesa, y la ley será aprobada en los primeros días de diciembre.
El agua no se centraliza ni se vende, es patrimonio de campesinos
Este 24 de noviembre el Frente Nacional para el Rescate del Campo y la Asociación de Transportistas Nacionales (ANTAC) realizaron un megabloqueo en 25 estados de la República, entre ellos Guanajuato, en donde los productores agrícolas pertenecientes al Distrito de Riego 011, tomaron la protesta como una oportunidad para hacer escuchar sus demandas en el tema del agua.
Aunque no tenían pensando realizar bloqueos en el estado, integrantes de más de 10 módulos de riego se concentraron en el Distrito 011 para solicitar al presidente Agustín Robles que levante la voz junto con los productores campesinos y junto con la gobernadora Libia Dennise García Muñoz Ledo se pronuncien y pidan detener la ley de aguas nacionales; pero no hubo respuesta.
Las puertas del Distrito de Riego 011 les fueron cerradas y pese a estar más de tres horas esperando una respuesta, los productores pidieron la destitución de Agustín Robles al considerar que no ha luchado por defender el agua de los campesinos y no dar la cara ante la problemática social que enfrentan.
Las autoridades estatales esperaron hasta el último minuto para enviar a representantes del Gobierno de la Gente para entablar plática con los productores, pero si tener verdadero poder de decisión los productores optaron por no participar en sus reuniones.
No se van a llevar nuestro patrimonio, no lo van hacer
Mauricio Pérez Cabrera, representante del movimiento campesino explicó que la ley de aguas nacionales afecta a todos como Nación, porque da el poder al gobierno de hacer con el agua lo que ellos quieran, y en su caso, quiénes tienen pozo los dejan en la indefensión total para seguir sembrando.
Es como si el gobierno te pide las escrituras de tu casa, y cuando tú mueres, el gobierno decide si tú casa se la quedan tus hijos o le busca un nuevo dueño; porque con la ley, ya no hay trasmisiones de derecho y toda la responsabilidad de administrar los títulos es de Conagua, institución que actualmente no tiene dinero, está lapidada y está más muerta que viva.
“No va a suceder, definitivamente no va a suceder; esto no es una amenaza es nuestro patrimonio y cuando hablamos de nuestro patrimonio y han jugado con nuestra dignidad, tenemos dos o tres años esperando al Gobierno paguen los apoyos, nos hemos acabado las sillas, los trabajos y no hemos desarrollado las conclusiones. No podemos poner el tema del agua en sus manos y es de los campesinos y así se va aquedar definitivamente”
Mauricio Pérez / movimiento campesino
Toman carreteras en protesta por defender su derecho al agua
Los productores cerraron las carreteras 45, 47, 57 y 90, en donde atravesaron tractores y con apoyo de los transportistas bloquearon cualquier paso, como una forma de resistencia y llamar la atención del gobierno.
Sin embargo, en lugar de ser escuchados, fueron criminalizados por el Gobierno Federal e ignorados por el Gobierno de Guanajuato.
Actualmente existen 12 líderes campesinos que cuentan con investigaciones en la Fiscalía General de la República por obstrucción de vialidades, y ante la nueva protesta tanto la presidenta Claudia Sheinbaum, como la secretaria de Gobernación, Rosa Icela Rodríguez deslegitimizaron el movimiento, acusando de haber intereses políticos detrás de los líderes campesinos y adelantaron que interpondrían denuncias contra aquellos que bloqueen las carreteras.
Pese a las amenazas, las carreteras fueron tomadas por los productores y alrededor de las seis de la tarde los bloqueos fueron levantados como se tenía el acuerdo nacional, sin embargo, los líderes dejaron claro que la lucha no ha terminado, que levantar el bloqueo no significa que ya se dieron por vencidos. Nada de eso.
Los productores se dijeron firmes en su lucha por buscar defender su derecho al agua, un precio justo para el maíz, en donde ni la palabra del gobierno se está respetando por parte de los empresarios, y por buscar dignificar el campo mexicano.
Las movilizaciones van a seguir y no descartaron buscar ir al Congreso de la Unión para enfrentar a los legisladores, de quiénes dijo deben de sumarse más porque para eso se les paga para que sean ellos quiénes defiendan los intereses del pueblo, en este caso del campo, que negocien los precios.
Sin embargo, Mauricio señaló que su propia irresponsabilidad tanto de la presidenta como de los políticos, legisladores es lo que los tiene luchando a pie de carretera, porque no han podido resolver una problemática social que tiene años y no ha sido escuchada.
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