El hallazgo de vestigios arqueológicos en el centro de Cuerámaro revela la riqueza histórica del municipio y detiene la construcción del colector pluvial en espera de una inspección oficial.
Las excavaciones para la construcción del colector de agua pluvial en el corazón de Cuerámaro llevaron a un hallazgo inesperado: piezas arqueológicas que obligaron a la suspensión inmediata de la obra y a la activación de los protocolos de protección del patrimonio histórico.
El descubrimiento ocurrió en las calles F. Antillón e Ignacio Zaragoza, donde el gobierno municipal había iniciado trabajos para mejorar el sistema de drenaje y el desalojo de aguas pluviales.
Detienen obra ante hallazgo de vestigios arqueológicos
La intervención, considerada prioritaria por la administración local, se detuvo luego de que los trabajadores localizaran objetos con características arqueológicas durante las maniobras de excavación.
En cumplimiento con la normativa vigente, los responsables notificaron de inmediato al Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), autoridad encargada de resguardar el patrimonio arqueológico del país.
Posteriormente, se informó a la Presidencia Municipal de Cuerámaro, encabezada por el Humberto Hernández Martínez, quien firmó un “Aviso Urgente” dirigido a los habitantes de la zona.
En el documento oficial, el alcalde confirmó que el INAH solicitó la suspensión temporal de la obra, así como el resguardo de las piezas localizadas, mientras especialistas del instituto acuden al sitio para realizar una inspección y determinar los pasos a seguir.
“El objetivo es proteger el patrimonio histórico y la cultura de nuestro municipio”, destacó Hernández Martínez en el aviso, donde también exhortó a la ciudadanía a mantener una actitud cívica y ética para evitar cualquier intento de saqueo o manipulación de los objetos encontrados.
El mandatario municipal reconoció que la suspensión generará afectaciones temporales a las viviendas de la zona centro, pero aseguró que se mantiene una comunicación directa con los habitantes y que su administración busca alternativas para reducir el impacto.
“El personal de obras públicas ha notificado a los beneficiarios de esta obra el motivo de paro determinado por esta dependencia federal. He instruido al personal de mi administración para mantener un canal de comunicación abierto y constante con ellos”
Humberto Hernández/alcalde de Cuerámaro
Cuerámaro: un subsuelo que guarda siglos de historia
El hallazgo arqueológico no sorprende del todo a los estudiosos de la región. Cuerámaro, cuyo nombre proviene del purépecha y significa “lugar de ranas”, es un municipio con una profunda huella prehispánica.
En su territorio se han documentado vestigios de antiguos asentamientos humanos y zonas de culto que datan de varios siglos antes de la llegada de los españoles.
Entre los sitios más reconocidos se encuentra la zona arqueológica de “Chiqueros”, un espacio donde se han encontrado restos cerámicos y herramientas que sugieren la presencia de comunidades agrícolas y comerciantes que mantenían vínculos con culturas vecinas del Bajío.
Otro punto de interés es el panteón prehispánico localizado en las faldas del cerro del Fuerte de los Remedios, donde se han hallado entierros ceremoniales y materiales asociados a rituales funerarios.
Estas evidencias refuerzan la hipótesis de que Cuerámaro fue un punto estratégico en la red de intercambio cultural del occidente de México.
Los recientes descubrimientos en el centro de la ciudad podrían estar vinculados a esa misma herencia ancestral.
Aunque aún no se han dado a conocer detalles específicos sobre las piezas encontradas, autoridades municipales confirmaron que se preservarán en el sitio bajo supervisión del INAH hasta que se emita un dictamen técnico.
Patrimonio bajo resguardo y una oportunidad para la historia local
La suspensión de las obras pluviales ha abierto una nueva expectativa en la comunidad: conocer más sobre el pasado de Cuerámaro.
Vecinos y autoridades locales coinciden en que este tipo de hallazgos refuerzan la importancia de proteger el subsuelo del municipio como depositario de su memoria histórica.
De acuerdo con registros del propio INAH, el estado de Guanajuato es una de las entidades con mayor densidad arqueológica en la región del Bajío, con sitios documentados en Pénjamo, Abasolo, Salamanca y Cuerámaro. Muchos de estos vestigios permanecen sin explorar a profundidad, lo que representa una oportunidad tanto para la investigación científica como para el impulso del turismo cultural.
Mientras los trabajos de drenaje permanecen suspendidos, el gobierno municipal de Cuerámaro reiteró su compromiso con el cumplimiento de los protocolos federales y con el respeto a la historia que yace bajo sus calles.
“Seguiremos trabajando de manera coordinada con el INAH para garantizar que este hallazgo sea atendido con el cuidado que merece”, señaló la Presidencia Municipal en su comunicado.La espera ahora recae en el informe oficial que emitirá el Instituto Nacional de Antropología e Historia tras su visita técnica.
Ese dictamen definirá si las obras podrán reanudarse o si será necesario modificar el proyecto para salvaguardar las piezas encontradas.
Por lo pronto, Cuerámaro suma un nuevo capítulo a su historia arqueológica: uno que recuerda que bajo cada calle, piedra o estructura, podría ocultarse una parte invaluable de su pasado prehispánico.
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