Incendio Marfil. Taller en la Universidad Guanajuato aborda restauración forestal

Incendio en Marfil: Universidad de Guanajuato impulsa restauración ecológica tras el fuego del 28 de abril

El pasado 28 de abril, un incendio forestal afectó parte de la sede Marfil de la Universidad de Guanajuato (UG). Las llamas, provocadas en una zona con sequía anormal, dañaron la vegetación que rodea los edificios y pusieron en riesgo la fauna y el suelo del lugar.

Ese hecho sirvió como punto de partida para que, durante la sexta Semana de las Ingenierías del Campus Guanajuato, se realizara un taller especial llamado “Introducción a la evaluación y restauración de un área quemada”. La actividad estuvo a cargo de la potente Michelle Farfán Gutiérrez, el Yann Godbert y el Alán Joaquín Arias Diosdado, docentes con experiencia en el combate y prevención de incendios.

Los tres forman parte de la Brigada Voluntaria de Manejo del Fuego “Los Chuines” y de la asociación Yaotzin Fuego y Territorio A.C., que desde hace más de cinco años trabajan con estudiantes y sociedad civil para atender y prevenir emergencias de este tipo.

El incendio de abril y su impacto

De acuerdo con datos de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), en abril la región enfrentaba falta de lluvias, lo que favoreció la propagación del fuego. El incendio alcanzó considerables dimensiones y dejó daños visibles: pérdida de plantas, erosión del suelo y riesgo de que la zona tarde más tiempo en recuperarse.

La brigada universitaria participó directamente en el combate de ese incendio. Ahora, en el taller, aprovecharon ese mismo espacio para mostrar a los estudiantes cómo analizar los efectos del fuego y qué medidas se pueden aplicar para recuperar la zona afectada.

Taller en el campo

En la actividad participaron 13 estudiantes de Ingeniería Ambiental, Ingeniería Civil y Geografía. Primero, los docentes explicaron qué tipo de vegetación existe en Marfil, destacando el matorral subtropical, que alberga gran variedad de plantas y animales.

Después, los jóvenes observaron el terreno y aprendieron a identificar los daños más evidentes: árboles y arbustos muertos, tierra suelta y arrastrada por el agua, y pérdida de cobertura vegetal. Con esas observaciones hicieron un diagnóstico inicial.

13


estudiantes participaron

Más tarde, practicaron algunas acciones de restauración: trazar líneas en el suelo para reducir la erosión y acomodar ramas y troncos secos para proteger la tierra. Estas medidas ayudan a que el agua de lluvia no arrastre la capa fértil del suelo y que la vegetación pueda recuperarse poco a poco.

La prevención como prioridad

Los docentes recordaron que en otras ocasiones ya se habían realizado trabajos preventivos en la zona. En 2022, por ejemplo, se construyó una brecha corta fuego y se retiraron residuos. Y en marzo de este año, ofrecieron la charla “Las barreras vivas corta fuego de hoy son el agua del mañana”, con un mensaje claro: prevenir incendios es más barato y efectivo que restaurar después del daño.

“Los incendios forestales ya son un problema crónico en muchas partes del mundo y también aquí en Guanajuato. Por eso es importante invertir más en prevención y restauración. Invitamos a toda la comunidad universitaria a sumarse”,

Talleristas

Un esfuerzo colectivo

La actividad también recibió apoyo de la Coordinación General de Apoyo Administrativo del Campus Guanajuato, dirigida por el docente Julio Iván Jaime Salcedo Gómez, junto con Xavier Núñez Ramírez, Coordinador de Calidad Administrativa y Manejo Ambiental.

La Universidad de Guanajuato subrayó que este tipo de ejercicios son clave no solo para la formación profesional de los estudiantes, sino también para crear conciencia social sobre la importancia de cuidar el medio ambiente.

Lecciones que deja el incendio

El fuego del 28 de abril en Marfil dejó claro que las zonas naturales de Guanajuato son vulnerables y que se requieren acciones coordinadas entre instituciones, brigadistas y sociedad. El taller fue una manera de transformar una experiencia negativa en una oportunidad de aprendizaje y acción, mostrando a los jóvenes que la restauración de ecosistemas es posible si se trabaja en equipo y con conocimiento técnico.

Con esta actividad, la UG refuerza su compromiso de proteger los ecosistemas locales y de preparar a nuevas generaciones para enfrentar los retos que deja el cambio climático y la crisis ambiental.

El dato

Con este ejercicio académico y práctico, la UG busca generar conciencia sobre la urgencia de prevenir incendios forestales y de aplicar metodologías efectivas para restaurar las áreas afectadas. El incendio del 28 de abril dejó una lección clara: el cuidado de los ecosistemas requiere preparación, coordinación y la participación activa de la sociedad.


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