El Gobierno de Irapuato invirtió 25.7 millones de pesos en la construcción de un macrotanque elevado en Villas de Irapuato que beneficiará a más de 50 mil habitantes y mejorará el abasto, la presión y la eficiencia del agua potable.
En Villas de Irapuato nunca más volverá a faltar el agua potable, luego de que el Gobierno de Irapuato invirtió 25.7 millones de pesos en la construcción de un Macrotanque de agua elevado de última tecnología que evitará el estrés hídrico de los mantos acuíferos, recarga de las reservas y un uso más eficiente y ecológico del agua.
La alcaldesa de Irapuato, Lorena Alfaro García junto con el director de la Japami, Roberto Castañeda Tejeda destacaron la instalación del primer marcrotanque de agua elevado en Irapuato que advierte beneficios para más de 50 mil habitantes de colonias como Pontevedra, Ejido de San José de Jorge López, Vista Alegre, además de Villas de Irapuato.
Obras hídricas con visión sustentable
Lorena Alfaro García, destacó que esta infraestructura forma parte de un plan estratégico con visión al año 2050, que permitirá contar con un servicio de agua más eficiente y sustentable, así como la preservación de loa mantos acuíferos de la ciudad.
“Para nosotros era importante que ustedes conocieran de primera mano lo que significa esta inversión que realizamos con este macrotanque, el cual forma parte de todo un sistema que tiene una hoja de ruta para la correcta gestión del agua en esta zona norponiente de la ciudad”
Lorena Alfaro García / presidenta Municipal
Este macrotanque no es únicamente un depósito de agua, es un sistema integral de almacenamiento diseñado para captar agua y tener una mejor distribución del líquido en la zona.
La infraestructura fue construida con tecnología de vanguardia y materiales de alta resistencia, alineados con la visión de una ciudad responsable con el medio ambiente y comprometida con la seguridad hídrica, destacó el Gobierno Municipal.

El Marcrotanque cuenta con tecnología de Vidrio Fusionado de Acero (Glass-Fused-to-Steel, GFS), que forma parte de los sistemas más novedosos para el tema del agua, ya que promete una durabilidad del tanque de al menos 50 años y mantener el agua potable con altos estándares de inocuidad al impedir la reproducción de microorganismos.
Sin embargo, esta tecnología no protege por sí misma los manos acuíferos, ya que el Macrotanque de 1 mil 500 metros cúbicos de agua con proyección a duplicarlo a 3 mil metros cúbicos será recargado por cuatro pozos que extraerán el agua del subsuelo irapuatense.
¿Cómo ayuda el Macrotanque al Acuífero?
El estado de Guanajuato, e Irapuato en particular, enfrenta un problema grave de sobreexplotación de sus acuíferos, lo que significa que se extrae más agua subterránea de la que naturalmente se recarga con la lluvia.
El Macrotanque ataca este problema indirectamente a través de la eficiencia en el bombeo y la regulación de la presión:
- Permite el Bombeo a Caudal Promedio (Menos Intensivo)
- Sin Macrotanque: El organismo operador (JAPAMI) se ve obligado a encender y apagar los pozos o a bombear agua a caudal máximo (el máximo que puede dar el pozo) precisamente en las horas pico (mañanas y noches) cuando la demanda es altísima. Este bombeo intensivo y errático estresa el acuífero, es menos eficiente y contribuye a su abatimiento.
- Con Macrotanque: El tanque permite que los pozos extraigan agua a un caudal constante y promedio (y por más tiempo, incluso durante la noche, cuando la tarifa eléctrica es menor), llenando el depósito gradualmente. Una vez lleno, el Macrotanque se convierte en la fuente principal de suministro para la red de distribución.
- Actúa como Almacén de Reserva
- El tanque almacena mil 500 metros cúbicos de agua. Esta reserva permite que, si uno o varios de los pozos de la zona fallan, o si la demanda sube repentinamente, el sistema de agua no tenga que exigir inmediatamente más agua al acuífero encender más pozos o forzando la extracción.
- La reserva garantiza la continuidad del servicio mientras se repara el pozo o se espera que baje la demanda, dándole un respiro al acuífero.
- Mejora la Presión y Reduce las Fugas
- Los tanques elevados utilizan la gravedad para distribuir el agua, manteniendo una presión constante y óptima en la red de tuberías (lo que se conoce como un tanque “flotante” o de “regulación”).
- Cuando la presión es demasiado alta o irregular (lo que sucede en sistemas sin tanques de regulación adecuados), se generan más fugas y rupturas en las tuberías. Al mantener la presión regulada, se reduce drásticamente la pérdida de agua por fugas en la red de distribución.
- En Irapuato, se ha reconocido que la eficiencia de la red es baja (alrededor del 54%), y reducir las fugas es equivalente a reducir la extracción del acuífero, pues la misma cantidad de agua que antes se perdía ahora llega a los hogares.
Además, el tanque cuenta con infraestructura nueva de líneas de conducción y estará conectado a lo que era el C4 del Japami, que ahora será llamado el ‘IAgua Irapuato’, que implica el monitoreo de la infraestructura hídrica a través de tecnología e inteligencia artificial.
En total, para este sistema innovador fueron invertidos 59 millones de pesos, de los cuáles 25.7 fueron exclusivamente para la construcción del macrotanque.
Cabe destacar que Irapuato no es la primera ciudad en Guanajuato en hacer uso de esta tecnología pues en la ciudad de León, por ejemplo, ya trabajan con estos sistemas que apuntan a contar con una mejor y más limpio sistema de almacenaje de agua y su distribución.

Empresa irapuatense entrega con retraso de casi siete meses macrotanque millonario
El contrato de Obra Pública JAPAMI/LPN/RP/2024-29 señala que fue la empresa PEFERCO SA de CV, la ganadora de la licitación para la construcción del macro tanque de agua elevado de Villas de Irapuato, y cuyo domicilio está registrado en la ciudad fresera.
El representante legal de la empresa, Gabriel Vázquez Pérez, representante de esta y otra empresa cuenta con al menos siete contratos con la Junta de Agua Potable y Alcantarillado del Municipio de Irapuato (JAPAMI) para diversas obras y suministro de materiales.
Según el contrato la obra debió de haber sido terminada en mayo de este año, sin embargo, no fue posible y el contrato original fue sometido a una modificación de ampliación de plazo, por lo que la Japami aplicó la fianza de más de 2 millones de pesos, pasando así, el contrato de 23.7 millones a casi 26 millones de pesos, según la documentación pública.













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